😱 "Miren, la IA me ha ahorrado 5000 €"

Spoiler: esta historia trata sobre un email endemoniado en plenas vacaciones, una putadita del Gobierno a los emprendedores y cómo la IA puede ahorrarte muuuuucha pasta.

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Vale, al lío. Te presento a Dani.

(Bueno, en realidad no se llama Dani, pero llamémosle así para preservar su anonimato).

Dani fue alumno de mi curso de IA para el marketing en la primera edición. Es un experto en publicidad, reconvertido en emprendedor, reconvertido en apasionado de la IA y de su marca personal.

Es un señor bonachón que siempre te alegra la tarde. Y más me la alegró todavía cuando, hace un par de semanas, empezó nuestra videollamada con esta frase:

“Miren, la IA me ha ahorrado 5000 €”.

Dani dejó el mundo corporativo para montar su propia agencia de medios allá por el año 2019. Y oh, sorpresa, un año más tarde llegó el innombrable 🦠.

Sus ingresos bajaron más de un 70 % y tuvo que pedir una ayuda del Gobierno. Afortunadamente, se la concedieron, y Dani pudo salvar el bache con los 5000 €.

Qué bien, ¿no?

Pues no.

4 años más tarde, en pleno julio y a través de un miserable email, el Gobierno le apuñaló por la espalda:

“Dani, resulta que esa ayuda que te dimos, no te la teníamos que dar, así que devuélvenosla”.

Bueno, no utilizaron esas palabras, sino otras mucho más rimbombantes y jurídicas, pero you get the point.

Dani no tenía la pasta, pero el Gobierno se la exigía en un plazo de 15 días. Y lo peor de todo: resulta que Dani SÍ que cumplía los requisitos para recibir la ayuda, aunque ese email del demonio se empeñara en que no.

El problema era que Dani, como todo el resto de los ciudadanos normales, se perdía con la jerga jurídica, los artículos y las leyes que citaron. Y no sabía cómo responder a ese email.

Hasta que, ¡clin! Se le encendió la bombilla 💡:

Pidió a ChatGPT que le explicara toda la verborrea legal en términos sencillos que pudiera entender hasta un chaval de instituto.
Usó Perplexity para buscar qué documentos debía citar para demostrar que él sí que cumplía los requisitos para recibir la ayuda.
Volvió a ChatGPT para redactar una respuesta que sonara convincente y, sobre todo, que se sustentara en los documentos legales.
Y, lo más importante, al terminar, acudió a un abogado para confirmar que todo lo que había hecho era correcto.